
14 Feb El desaire al papa
La primera vez que vi este video, sentí enojo, frustración, lástima… Véanlo ¿Qué opinan ustedes?
Tristísimo, ¿no? Pues sí. Según el video, en este viaje a Alemania, en septiembre de 2011, el ahora Papa emérito, Benedicto XVI, recibió un desaire por parte de los miembros de la Conferencia Episcopal Alemana en su viaje a éste, su país.
A raíz de su renuncia, este video ha vuelto a circular, especulando si este tipo de actitudes por parte de los “altos mandos” de la Iglesia son las que orillaron al Sumo Pontífice a renunciar a su cargo.
Dentro de mi enojo, después de ver el video una y otra vez, decidí investigar si lo que el video daba a entender era cierto. Afortunadamente, descubrí también, que el 11 de octubre de ese año, Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede, dio una conferencia de prensa en la que aclaró que la interpretación de ese video era ridícula, pues en realidad el Papa estaba presentando al Presidente alemán a su séquito, el cual había viajado en el avión con él desde Roma y que, entre los pocos que sin embargo le dan la mano al Papa -aunque no era necesario-, estaban Mons. Zollitsch, Presidente de la Conferencia Episcopal Alemana y Mons. Woelki, el entonces nuevo Arzobispo de Berlín, los únicos dos obispos alemanes presentes en el video que se incluyeron en el séquito del Papa al llegar a Berlín y que no viajaron en el avión con él. Las declaraciones de Lombardi me hicieron sentir mucho mejor, pero al poco tiempo, no pude evitar pensar, ¿y si no hubiera sido así, y si en efecto el Papa hubiera sufrido un desaire? … Bueno, pues creo que en ese caso, Benedicto XVI también hubiera estado acostumbrado a ello.
Sí, cuántas veces no escuché: “este Papa no me gusta”, “este Papa tiene cara de malo”, “este Papa es alemán como los nazis”, “este Papa no es mi Papa”, “Papa, Juan Pablo II”, o “éste es sólo un Papa de transición”.
Desde mi punto de vista, se pasó tanto tiempo añorando el pontificado de Juan Pablo II, que para cuando nos dimos cuenta, Benedicto XVI ya hasta había renunciado. Creo que la mayoría de los católicos no nos dimos la oportunidad de conocer a ese Papa alemán que tanto se entregó a su Iglesia.
Benedicto XVI, fue un gran Papa, un excelente teólogo, un verdadero cristiano que hasta el último momento dio testimonio y predicó con el ejemplo. Nos dejamos llevar por los medios de comunicación y realmente, ¿cuándo nos preocupamos por conocerlo por nosotros mismos?
Tres encíclicas y un Año de la Fe después -entre muchos otros discursos y reformas-, Benedicto XVI ya no es el dirigente de la Iglesia Católica y es momento de que nosotros como católicos nos informemos mucho más acerca de cuál fue su legado.
En estos días, Paloma Gómez Borrero, una periodista española, afirmó que la salud del Papa emérito ha decaído muchísimo y que su deterioro en los últimos 15 días ha sido tremendo.
No permitamos que ocho años en la historia de nuestra Iglesia pasen desapercibidos. La Iglesia no sólo depende de un Papa, sino de quienes la conformamos. Así que si después de leer esto les da curiosidad conocerlo, con mucho gusto les presento a Benedicto XVI.