Es común que mucha gente crea que sí y, de hecho, esto es en parte cierto, pero para poderte casar una segunda vez, tienes que contar con una declaración de nulidad matrimonial de tu primer matrimonio. 

Pero…  ¿Qué es una declaración de nulidad matrimonial? El matrimonio es un acto jurídico que requiere características, propiedades y formalidades específicas, y si alguna de estas no está presente al momento de dar nuestro consentimiento – “sí acepto”-, no podemos llamar matrimonio a ese acto jurídico. 

Entonces, una declaración de nulidad matrimonial es el proceso que debes llevar a cabo ante un Tribunal Eclesiástico [1] para demostrar que antes de casarte, o al momento de hacerlo, existían motivos lo suficientemente importantes para que se produjera esa nulidad.

¿Cuáles pueden ser esas razones “suficientemente importantes”?

• La falta de forma canónica [2] en la celebración del matrimonio,
• La existencia de algún impedimento [3]al momento de casarse o,

Los vicios en el consentimiento de cualquiera de los cónyuges, que es lo que conocemos como causales de nulidad de matrimonio [4].

¿Qué pasa si no llevo a cabo este juicio?

Si no tienes un acta en donde se declare la nulidad de tu primer matrimonio, no te puedes volver a casar por la Iglesia porque estarías cometiendo adulterio.

¿Pueden entonces darme solo una bendición?

Aunque este tipo de situaciones se presentan, debes saber que son ilegales. El matrimonio es un sacramento que une a los esposos para toda la vida, hasta que la muerte los separe, por lo tanto, no se puede bendecir la unión de dos personas cuando una de ellas está casada con otra.

Si tú tuviste un primer matrimonio que por cualquier razón se terminó y tienes la intención de volverte a casar, te invitamos a regularizar tu situación ante la Iglesia e iniciar el juicio de nulidad matrimonial, para que así, si lo deseas, sí puedas “volverte” a casar. 

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