31 Ene Si los dos queremos la nulidad, obtenerla es más fácil.
Muchas personas creen que al igual que en un divorcio exprés, una nulidad de matrimonio por la Iglesia se consigue más rápido y fácil si ambas partes están de acuerdo en obtenerla. Esta idea se ha visto reforzada por lo que en su momento publicaron los medios de comunicación después de las reformas que el Papa Francisco hizo a la ley en 2015, creando el “proceso breve”, sin embargo, no es así.
Veamos:
El matrimonio se compone de propiedades esenciales como la perpetuidad y la indisolubilidad, lo que quiere decir que un matrimonio es para siempre y ningún poder o autoridad lo pueden disolver.
Las personas quedan en libertad para volver a contraer matrimonio por la Iglesia [1]a fuerza tienen que haber llevado a cabo un juicio de nulidad matrimonial en el que un grupo de jueces canónicos haya determinado que el matrimonio tenía los suficientes “defectos” [2] o “faltas a la forma”[3], como para poder considerarse que no es un verdadero matrimonio y así, lo hayan reconocido como nulo.
Tomando esto en cuenta, podemos ver que entonces, en el juicio de nulidad matrimonial, que “se dé”, depende de que las partes hayan logrado probar la existencia de esos defectos o faltas, al momento de celebrar el enlace, no de que solamente quieran que la nulidad se dé.
Por lo mismo, es necesario llevar a cabo ante un Tribunal Eclesiástico [4], un juicio completo [5], con cada una de sus partes, en las cuales se desahoguen las pruebas que marca la ley y así poder probar lo que se alega.
Es cierto que muchas veces las cosas se facilitan cuando los dos exesposos están de acuerdo en la versión de lo que sucedió, sin embargo, esto no lo hace más fácil, pues durante el juicio, el matrimonio contará con su propio abogado, el Defensor del Vínculo Sagrado, que tendrá como función demostrar que el matrimonio es válido, por lo que la versión de ambas partes deberá ser contrapuesta con la de este Defensor, para ver cuál es la realidad del matrimonio que se va a juzgar.
Un juicio de nulidad matrimonial con desenlace “afirmativo” no es imposible, pero sí es técnico y especializado, por lo mismo, te recomendamos buscar asesoría personalizada de un abogado y procurador autorizado [6].
Si tú o alguien que conoces está en esta situación, contáctanos, podemos asesorarte.